Niveando

Me he dado cuenta de que uso tantos productos Nivea como días tiene la semana, así que me he entretenido a darle a cada uno un día de la semana. ¿Aburrida? En realidad, no; creo que se debe más a mi mente hiperactiva.

El lunes es perfecto para la mascarilla nutritiva con miel, mi piel se merece lo mejor después de una larga jornada laboral y es lo único que consigue relajarme, tiene ese aroma dulce que tanto me gusta. Un verdadero coctel en el que sus ingredientes, karité, macadamia y miel, me transportan a un paraje de calma y sosiego (y no exagero).

Martes, ya queda menos para el fin de semana. El desodorante Pearl&Beauty hace que me sienta fresca durante todo el día y, por supuesto, su perfume afrutado me parece muy sexy, así que es un dos en uno perfecto para el día a día, que una no debe perder el glamour ni el sex-appeal, a pesar de que sea día laborable.

Miércoles, el ecuador de la semana. Más vale prevenir que curar, por la mañana, después de una buena ducha, uso el gel de hidratación express, de rápida absorción a pesar de su textura acuosa, pero lo mejor es el delicioso olor a menta que, por supuesto, refresca mis piernas.

Jueves, no queda nada. No sé si alguien ha probado un champú de Nivea, hay toda una gama especializada en cada cabello. Sorprendentemente, porque tengo el pelo super liso, a veces uso Easy Liss de Nivea, me lo deja muy lacio y nada encrespado, fácil de peinar, muy sedoso y con un brillo extraordinario (o sea, todo lo que busco en un champú). Parece casi mágico, creo que es por el aceite de Babassu, no tengo ni idea de sus propiedades, pero se lleva de maravilla con mi melena.

Viernes, esto ya está, en unas horas empieza el fin de semana, un poco de brillo en los labios y a la calle. Mi bálsamo labial favorito es, por supuesto, de Nivea, con sabor a cereza. Tiene un leve tono rojizo, muy suave. Lo malo es que también sabe a cereza. ¡Riquísimo!

Empieza el fin de semana, es sábado y el día ha amanecido radiante, vamos a la playa a disfrutar del sol, pero sin olvidarme de mi protector solar, porque como decía mi abuela "la piel tiene memoria" y debemos cuidarla.

No me gusta nada el domingo por la tarde, es el preludio de la rutina. Lo mejor es prepararme, es mi rato de cuidado personal. Hace poco que he descubierto las tiras limpiadoras purificantes, me arrancan los puntos negros que da gusto. Y a esto le sumo el gel exfoliante y la limpiadora. Hay que empezar la semana con el cutis a punto.